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小寨路 VS. menos es más

Permítanme frivolizar, señoras y señores, que todavía estoy de mala leche por el comentario de Berlusconi sobre Obama ("es joven, guapo, y hasta esta moreno") y necesito relajarme. Quiero lanzar un breve apunte sobre la vestimenta de los chinos, crítico y por descontado parcial, y que no se me malinterprete, que obviamente hablo de quienes tienen un cierto poder adquisitivo; el resto bastante tiene con mantenerse alejado del umbral de la pobreza.

Dejando el cosplay aparte, no he detectado más tribus urbanas que skaters (pocos) y emo (por doquier).

Ella no lo sabe, pero lleva al cantante de The Horrors encaramado a la cabeza (!)

  1. Ellos. Les gusta vestir ajustado, con mucho colorido a lo Paul Smith de imitación, letras, bordados, purpurina en las camisetas y gomina en el pelo. Bolsos (de los de dos asas, de mujer) o bandoleras. Los trajes de chaqueta, casi siempre azul lapislázuli.

  2. ...o bien tenemos la version "forever boyscout", con deportivas con cámara de aire y aire infantil/informal, de modo que el individuo podría tener cualquier edad entre los 18 y 35 años.
  3. Ellas. Les encanta vestir al estilo ecléctico japonés. Problema: el 99% de las veces el eclecticismo les sale por la culata y parecen la Chilindrina disfrazada de un manga. Tan bien que imitan los bolsos de Prada y los iPhone, y resulta que al streetstyle ¡que no acaban de pillarle el truco, oiga! La base la tienen: minifaldas, fulares, complementos rosas, tacones de muñequita y el mismo color de tinte de las modernillas japonesas: un tono caoba-zanahorio. Fallos: combinar 25 estampados diferentes en el mismo conjunto y, aunque de todo hay en la viña del Señor... se resume en que las chinas no tienen mucho gusto vistiendo (si no lo digo, reviento). Repito que no es una cuestión de dinero, bien monas que irían más sencillas y por menos.

  4. La palabra que mejor define el estilo de las chinas es un adverbio: "demasiado". Y lo mismo se aplica a los pijamas y la ropa interior: dibujitos, lazos, encaje, brillitos doratos, volantes... y todo en la misma prenda. Encontrar un pijama con el que no me diera vergüenza abrir la puerta fue toda una odisea.


Y yo me pregunto, con lo bonito que es el cuello mao y los botones de las típicas túnicas y vestido chinos, ¿¿por qué han desaparecido?? Yo esperaba encontrar alguna tienda de ropa de estilo oriental, pero ni rastro. Lo mas oriental que he encontrado ha sido en el barrio musulmán... oriental de Oriente Próximo.

Un amigo chino me dice que eso jamás en la vida se lo pondria una china, excepto si forma parte de un uniforme de trabajo de un museo o una casa de té, por ejemplo. Es una pena, porque da gusto ver a las japonesas vestirse "de domingo" con su kimono, sus zori (zuecos de madera) y sus tabi (calcetines tipo manopla), simplemente para irse a cenar con sus amigas. Si es que se está perdiendo todo. Y pensar que China fue el modelo a seguir para Japón durante siglos... Desde luego a mí me queda claro quién ha sabido adoptar y adaptar mejor la vestimenta occidental.

Igual es mi imaginación, pero juraría que a mi también se me está pegando algo...

Drum Tower

Justificar a ambos lados


Por algo la llaman Torre del Tambor. Por 10 yuan te dejan golpear con una maza un gong enorme. Una excelente terapia antiestrés que puede evitar males mayores.
La historia de los tambores en China es antiquísima, y no sólo los utilizaban para advertir sobre ataques enemigos y dar las horas, sino que creen que escuchar el sonido del tambor puede ayudar a poner orden en el alma. Cuando compres la entrada para Bell Tower o Drum Tower, consulta los horarios de los espectáculos, que son gratuitos y están bien ambientados en lo que a vestimenta se refiere.








Mención especial al gato de escayola que a mamá le habría encantado que robara de la exposición para ponerlo en el salón y a la mujer del escaparate viviente, que se dignó a sonreír para la foto.

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